Barcelona parada y fonda
Nada más llegar al nuevo destino en seguida me puse en contacto con mi nuevo Club, este me tenía
preparada una sorpresa el día 22 sábado se iba a participar en la cursa
Barcelona- Vich-Barcelona con motivo de la fiesta de la Merced, en esta carrera
de más 140 Km. Ida y vuelta participaron más de 150 corredores de distintos lugares, Francia,
Bélgica, Navarra, Valencia, Castellón y Barcelona, la carrera quedo deslucida y quedo suspendida
por la fuertes lluvias caída en toda Cataluña, hubo momentos en que las cotas de
lluvia alcanzaron más 120 litros el agua se paseaba a sus anchas por las
calles, fue la famosa riada, en la que barrios y pueblos próximos al rio
Llobregat quedaron totalmente inundados, al entrar a Barcelona por la diagonal
el agua nos llegaba por los tobillos, para mí fue un verdadero bautismo
deportivo. No se dio ganador a nadie y al no haber trofeos únicamente se
repartieron regalos.
Mi aportación deportiva fue acogida con cierta reservas, estaba convencido en que era un extraño, no siempre se me tenía en cuenta en las estrategias a seguir en la competiciones, Aunque Martínez Guber el entrenador del club y seleccionador del equipo de la Federación Catalana, hacía ver a todos mi aportación desinteresada, fueron muchas las carreras a la las cuales tuve que renunciar a una mejor clasificación en favor de algún compañero.
Al estar inscrito en un club catalán fui seleccionado para representar a Cataluña en el Campeonato de España de fondo en carretera, por federaciones, quedamos campeones, aunque alguno de los compañeros también seleccionados desconfiaba de que yo colaborase.
Al finalizar la competición en la comida que dio la federación Catalana, Martínez Guber destacó mi actuación en el campeonato, y demostró una vez más que la profesionalidad deportiva estaba por encima de colores y banderas, al final mis compañeros me felicitaron y decidieron que fuera yo el que recogiera el trofeo del campeonato.
El curso de entrenadores comenzó el 4 de Octubre el único
becario por Madrid solo fui yo, del resto de España fueron ocho, todos
residimos en la misma pensión y ninguno pertenecía al patinaje.
En Palacio de Deportes de Barcelona fue donde se hizo la
presentación del curso, el número total de alumnos inscritos al curso de
Educación Física fue de cuarenta y tres, dos años después solo terminamos
diecinueve.
Yo volvía a Madrid solamente en las Navidades, Semana Santa y Vacaciones del verano.
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